Wallapop: un reposicionamiento de marca brillante
Bueno, bueno, es que el de hoy es uno de esos casos en los que la creatividad es capaz de conseguir cosas increíbles. Uno de esos anuncios que me dan cosquillitas en la barriga, de esas que saben a primera cita😻. Qué barbaro Wallapop. Qué vuelta de tuerca. Qué buena producción. Qué buen casting. Qué buen tono. No me lío más y os cuento.
Primero veamos el spot del que parte toda esta emoción por mi parte⤵️:
‘Lo hecho, hecho está’
💥
Wallapop. La plataforma de clasificados por excelencia. Compra y venta de productos de segunda mano entre usuarios a través de Internet. Así lo definiría yo hasta el 2021. En 2022 su definición –para mi– ha cambiado.
Con esta campaña Wallapop ha ido más allá, reposicionando su marca –y su negocio–. Y lo han hecho de forma sobresaliente.
Sostenibilidad (real)
Producción responsable, consumo ético, km 0, envases biodegradables, materiales reciclados… Las marcas hacen un gran esfuerzo por hacer realidad la sostenibilidad. Sorry not sorry. Wallapop ha sabido superar cualquier buena intención dejando claro que lo más sostenible es no producir y dar nueva vida a aquello que ya tenemos.
El tono
Porque no es solo lo que dice –el importantísimo foco sobre los sistemas de producción irresponsable y el consumo excesivo de nuestra sociedad actual– sino el cómo.
Consiguen con un tono amable y un estilo fresco que la concienciación mediambiental llegue desde una perspectiva casi optimista. Sin sentimiento de culpa, sin fustigar. Simplemente promoviendo el consumo sostenible y el alargar la vida de lo ya producido.
“Es una campaña que pretende concienciar a la sociedad sobre la importancia de producir y consumir de manera responsable, con imágenes impactantes, pero desde una perspectiva positivista”
¿Segunda mano?
Revalorizan 'su producto' dejando de hablar de 'segunda mano' (que irremediablemente nos lleva a tiempos pasados) dando protagonismo a 'las cosas que ya están hechas'. Un nuevo punto de vista que transforma el significado de la marca y, además, promueve –entre quienes toman conciencia medioambiental– que Wallapop sea la primera opción de compra. Un nuevo modelo de consumo que piensa en el futuro. Me quito el sombrero ante estos pequeños detalles.
La tribu
¡Y qué tribu! Han fichado a un buen team de activistas. Algunos centrados en temas de sostenibilidad, como Joan Kareaga –fundador de la marca de moda sostenible Bask– o Claudia Fernández –defensora de la moda de segunda mano y el veganismo– y otros, como Imana Raissali –rapera catalana, ganadora del premio Tik-Tok a la diversidad e inclusión 2021–, Mara Jiménez –referente en la lucha contra la gordofobia– o Alan El Ruedas –conocido por romper prejuicios sobre la movilidad reducida– que enfocan su contenido en redes a activismo social visibilizando distintas diversidades.
Todos comprometidos. Todos cargados de valores. (Por no hablar de la viralidad del mensaje entre sus audiencias😉).
Mucho más que un spot
Claramente estamos antes una acción estratégica en la que la marca se reposiciona. Wallapop pasa de ser una plataforma de venta de artículos de segunda mano a una plataforma comprometida que promueve un consumo responsable y consciente.
80 segundos repletos de creatividad y estrategia en los que se asume el daño medioambiental ya hecho y en los que se promueven nuevas formas de consumo. Lo hecho, hecho está.
Que es una campaña publicitaria, si. Que es mucho más que eso, también.
Los responsables de la magia son la agencia creativa MONO Madrid y el director creativo Jesús Revuelta. Un ejercicio magnífico de reposicionamiento donde uniendo la creatividad y la estrategia han demostrado que la marca Wallapop tiene mucho que decir. ¡Bravo!👏🏽
